Vuelve el ingenio creador desbordado y plurirrelacional de Juan I. Ferreras a regalarnos una obra admirable. En este caso, sirviéndose del ardid literario de simular clases (en la Sorbona, para más señas, donde él fue profesor), nos enfrenta frente a frente a dilemas morales, políticos, científicos y, sobre todo, literarios.
La frescura de su discurso, que emula a conciencia el Juan Mairena de Machado, pero en otro tiempo, en otros espacios, hace de este libro un ejemplar de deliciosa y sorprendente lectura. El lector agradecerá las espuestas de un protagonista que no pasa ni un tópico, ni un “déjà vu”, ni un juicio que conlleve prejuicio.