ISBN: 978-84-122569-0-1. Depósito Legal: LE-301-2020. Páginas: 90. Impresión: cuatricromía. Encuadernación: rústica con solapas.
No puede ser más oportuna la publicación de este libro orientado, primordialmente, a facilitar a los niños el conocimiento de la Pulchra Leonina. Hace varias décadas, en un atardecer del mes de agosto, se acercó a mí, con cierta timidez, una anciana muy conocida en nuestra ciudad. «Permítame que le cuente una anécdota personal», me dijo. «Cuando yo tenía tres o cuatro años, no más, mi abuelita me trajo por primera vez a la catedral. Era por la tarde. El rosetón del poniente expandía un chorro de luz que inundaba la nave mayor. Ello me conmovió de tal manera que exclamé: “¿Abuelita, es este el cielo?”. Ella, conmocionada también, me contestó: “No, hija. Este no es el cielo, pero se le parece”». Tal experiencia ha sido imborrable a lo largo de toda mi vida.
Bienvenida, pues, sea esta nueva publicación de Carlos Taranilla. Aunque va dirigida específicamente a los niños, pronto se convertirá en instrumento útil para todos los visitantes, pues nunca se ama de verdad lo que no se conoce.
Extracto del Prólogo de D. Máximo Gómez Rascón
Director del Museo Catedralicio Diocesano de León
No puede ser más oportuna la publicación de este libro orientado, primordialmente, a facilitar a los niños el conocimiento de la Pulchra Leonina. Hace varias décadas, en un atardecer del mes de agosto, se acercó a mí, con cierta timidez, una anciana muy conocida en nuestra ciudad. «Permítame que le cuente una anécdota personal», me dijo. «Cuando yo tenía tres o cuatro años, no más, mi abuelita me trajo por primera vez a la catedral. Era por la tarde. El rosetón del poniente expandía un chorro de luz que inundaba la nave mayor. Ello me conmovió de tal manera que exclamé: “¿Abuelita, es este el cielo?”. Ella, conmocionada también, me contestó: “No, hija. Este no es el cielo, pero se le parece”». Tal experiencia ha sido imborrable a lo largo de toda mi vida.
Bienvenida, pues, sea esta nueva publicación de Carlos Taranilla. Aunque va dirigida específicamente a los niños, pronto se convertirá en instrumento útil para todos los visitantes, pues nunca se ama de verdad lo que no se conoce.
Extracto del Prólogo de D. Máximo Gómez Rascón
Director del Museo Catedralicio Diocesano de León